"... se cortan las tiernas puntas de esta planta en pequeños trozos, que se fríen con aceite, preferentemente de oliva, y un poco de sal, a fuego lento. Puede acompañarse de ajos tiernos, o ajo cortado a trocitos muy pequeños. Cuando ya están fritas se extrae el aceite sobrante y se añade el huevo batido. Se remueve hasta que el huevo empieza a cuajar y se da la vuelta a la tortilla, acompañados de un plato llano o un vuelve tortillas."Ésta podría ser la típica receta de este estupendo plato que estos días podríamos comer en Castelnou.
Como muchas otras plantas, la tuca comienza ahora a crecer en muchos de los ribazos de los campos de la huerta. La tuca es una especie de enredadera que reconoceremos fácilmente por sus característicos "muelles", que le sirven de amarre a casi cualquier parte. La punta más tierna de estos tallos, lo que aquí se llama "la guía", es lo que se corta para posteriormente cocinar.
Me decía el tio Valero, que en los años previos a la guerra civil, y también en la posguerra, cuando la comida escaseaba, los vecinos de Castelnou recolectaban todo tipo de hierbas, que les servían de comida. Sin duda éste es un ejemplo, que por su delicado paladar se sigue conservando en nuestra cocina.
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