Un plato típico de estos días en Castelnou es este, calabaza con patatas y arroz.
Al sacar el contenido de las calabazas para hacer las famosas calaveras, se cocina este cortado a tacos, no muy gruesos con patatas del mismo tamaño y no mucha agua y sal. Cuando las patatas están a mitad de cocción, se añaden unos puñados de arroz. Transcurrido un tiempo y todavía le falta un poco al arroz, sin que se quede sin caldo, se añade un sofrito de ajo, cebolla y unos taquitos de panceta, que se dejan hervir hasta que el arroz esté en su punto. El resultado es un plato con un sabor en el que predomina el gusto de la calabaza que a mí personalmente me encanta.
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